Certificados Energéticos

¿QUÉ ES EL CERTIFICADO ENERGÉTICO?

El certificado energético es un documento que indica cuánta energía consume un edificio y detalla sus características energéticas. También se especifica la cantidad de CO2 que desprende hacia la atmósfera.

Un técnico especializado se encarga de elaborar el informe luego de hacer una inspección en el edificio. De esta manera calcula el consumo energético del edificio o unidad durante un año.

Certificado energético 3

Todo lo que necesitas saber sobre el certificado energético

Para obtener el certificado es preciso pasar por el proceso de certificación. Para ello, un técnico competente visita el inmueble y recoge la información sobre el consumo de energía en este.

Luego de la visita, el técnico emite el certificado y asigna la etiqueta energética. Con esta se indica la clasificación energética del edificio.

La certificación la realiza un técnico que posea una titulación que lo habilite para redactar y ejecutar proyectos de edificación o sus instalaciones térmicas. Estos incluyen arquitecto, arquitecto técnico, ingeniero e ingeniero técnico.

En Arquitectos Zone contamos con arquitectos y aparejadores que califican como técnicos competentes para emitir el certificado energético.

Con el Real Decreto 235/2013, de 5 de abril se aprobó el procedimiento mediante el que se realiza la certificación energética en España. En esta norma se define cuándo es obligatorio, las excepciones y quiénes son los técnicos competentes, entre otras regulaciones.

De acuerdo a este Real Decreto, es obligatorio obtener el certificado cuando se trata de edificios nuevos, edificios o unidades de edificios existentes que se vayan a vender o alquilar, o que estén ocupados por una autoridad pública.

Cuando se va a vender o alquilar un inmueble, hay que incluir una copia del certificado en el contrato. Asimismo, debe mostrarse al publicitarlo en las plataformas de compraventa y alquiler y al depositar la fianza de alquiler en un organismo oficial.

El propietario del inmueble es el responsable de contratar al técnico especialista para obtener el certificado energético.

Ley 8/2013, de 26 de junio establece sanciones entre 300 y 6.000 euros a quienes incumplan las regulaciones anteriores o presenten resultados falsos.

Para obtener la certificación energética en España se deben seguir los siguientes pasos:

  1. Contratar a un técnico autorizado

Póngase en contacto con un técnico especialista. Puede ubicarlos a través de las comunidades autónomas y los colegios profesionales de Arquitectos y Aparejadores. Pida presupuesto y, al encontrar la alternativa que le convenga, acuerde una cita para realizar la inspección.

Durante la inspección el técnico debe tener acceso a todas las instalaciones. De manera que si existen zonas comunes como calderas o equipos de climatización, el propietario debe solicitar acceso a estas con anticipación.

  1. Visita al inmueble

La inspección es obligatoria y obtener un certificado sin la visita a la vivienda o edificio es fraude. Durante la visita el técnico revisará toda la vivienda para recoger los datos que permitan calcular el consumo energético. Aquí se incluye información sobre la envolvente como la composición del muro, huecos, cubierta, etc.

Asimismo, revisará el estado de las instalaciones como iluminación, calefacción, refrigeración, agua caliente y otros. El técnico tomará medidas, fotografías, realizará un croquis y s posible que revise las facturas energéticas.

  1. Elaboración del certificado energético

El siguiente paso es calcular los resultados. Para hacerlo, el técnico transcribe los datos que obtuvo a uno de los programas informáticos habilitados por el Ministerio de Industria.

El programa determinará la eficiencia energética del inmueble y el técnico elabora un informe con este resultado. En este documento incluirá las recomendaciones para mejorar la calificación.

  1. Registro del certificado energético

Para que el certificado sea válido hay que registrarlo ante el organismo competente habilitado en la comunidad autónoma. El proceso lo puede hacer el propietario o el técnico. Sin embargo, es preferible que lo haga el especialista ya que puede ser un trámite complejo.

  1. Etiqueta energética

La etiqueta energética se obtiene luego de registrar el certificado ante la administración. En esta se presenta un resumen de la información sobre el consumo energético.

El certificado es válido por 10 años, luego de los cuales hay que renovarlo.

El contenido que debe contener el informe del certificado energético es el siguiente:

  • Datos generales del inmueble, así como del técnico a cargo de la inspección y certificación.
  • Identificación del procedimiento que se siguió para la certificación. En esta sección se describen:
    • Las características térmicas del inmueble.
    • Normas de ahorro y eficiencia energética al momento de la construcción cuando aplique.
    • Pruebas y comprobaciones que realizó el certificador durante la inspección.
    • Calificación energética del inmueble.
  • Recomendaciones del técnico para mejorar la calificación energética del edificio.

La etiqueta energética es el documento que permite conocer de manera rápida y sencilla la eficiencia energética de un edificio.

Esta herramienta resume la información del certificado energético identificando el consumo de energía primaria al año y las emisiones anuales de dióxido de carbono.

En la etiqueta se utiliza una escala de clasificación por letras que va desde la A, para los inmuebles más eficientes hasta la G para los menos eficientes.

Además, la etiqueta también contiene información como la ubicación, el tipo de vivienda, referencia catastral, número de registro y fecha de validez del certificado.

Preguntas Frecuentes

Cualquier persona puede solicitar un certificado energético. Sin embargo, la norma establece que es obligatorio para todos los proyectos de nueva construcción desde 2007. Asimismo, todos aquellos inmuebles que se vayan a poner a la venta o en alquiler deben obtener la certificación.

En el Real Decreto 235/2013 se indica también qué edificios no están obligados a obtener el certificado. Entre las excepciones encontramos residencias vacacionales que se usen menos de cuatro meses al año; inmuebles que se compren para reformar o demoler; edificios aislados de menos de 50 m2.

Tampoco es obligatorio para edificios protegidos; construcciones provisionales que se vayan a usar menos de dos años; aquellos donde se realicen cultos religiosos; así como construcciones agrícolas, militares e industriales.

De acuerdo al Real Decreto 235/2013, el propietario del inmueble está obligado a incluir la certificación energética en cualquier oferta o promoción de venta o alquiler.

Cuando se produzca el alquiler o venta, el propietario original debe mostrar el certificado al arrendatario o comprador e incluirlo en el contrato. En caso de que se trate de una renta se anexa solo una copia, y si es para la venta se entrega el original.

No hay una regulación oficial sobre las tarifas del certificado energético, por lo que este se establece por la libre oferta y demanda.

Existe una serie de factores que influyen el precio de la certificación. Entre los que podemos mencionar el tipo de inmueble, tamaño y ubicación. En Arquitectos Zone contamos con un comparador de precios en el que puede comparar las tarifas y escoger el que más le conviene.

También hay que destacar que dentro del presupuesto de Arquitectos Zone se incluye las tasas administrativas que requieren algunas comunidades autónomas para el registro del certificado.

Sí, para que la certificación energética sea válida debe registrarse ante la instancia habilitada para ello en la comunidad autónoma.

El registro lo puede hacer el propietario o el técnico, y el proceso varía en cada comunidad.

Quienes incumplan con la regulación de certificación energética tendrán que pagar las multas que establece la ley.

Las infracciones están tipificadas en la norma y se sancionan con multas de 300 a 600 euros las leves. Las graves reciben multas entre 601 y 1.000 euros. Por último, las muy graves se castigan con multas entre 1.000 y 6.000 euros.

La norma establece sanciones por las infracciones que puedan cometer tanto el propietario como el técnico. Y en ambos casos será el propietario quien deba pagarla, por ello debe asegurarse de contratar los servicios de personas responsables y que le den garantía de su trabajo.

Por otra parte, también puede recibir sanciones por incumplir con los derechos del consumidor al no informar sobre el certificado o entregar información fraudulenta.

La administración competente en cada comunidad autónoma será la que se encargue de comprobar que los certificados energéticos cumplen con la norma establecida. Para ello, realizará inspecciones al inmueble para corroborar los datos que están en el informe y asegurarse de que no se trate de un fraude.

Esto dependerá del año en el que se haya alquilado el inmueble. Si el contrato actual entró en vigencia antes del 1 de junio de 2013 no será necesario realizar la certificación energética, y tampoco se tendrá que obtener si se renueva el contrato al mismo arrendatario.

En cambio, cuando se vaya a alquilar ese inmueble a un nuevo inquilino, entonces sí será necesario tener el certificado energético.

En una comunidad de vecinos cada propietario puede solicitar la certificación de su unidad, pero también existe la posibilidad de gestionar un solo certificado para todo el edificio. Si optan por esta alternativa todos recibirán la misma certificación energética.

Por otra parte, sí es obligatorio obtener una sola certificación energética para todo el edificio cuando este pertenece a un único propietario. De igual manera, se exige un certificado único al solicitar una subvención para rehabilitación energética.

No es obligatorio alcanzar una clasificación mínima. Sin embargo, junto con la certificación el propietario recibirá una serie de recomendaciones para mejorar el consumo energético.

Es aconsejable que se hagan las modificaciones que indica el técnico, aunque tampoco son obligatorias. Aplicarlas tiene dos ventajas principales: por una parte, ayuda al medioambiente y, por otro, reduce el gasto económico.

Muchos factores dentro de una vivienda o edificio afectan el consumo energético. Estos elementos que influyen en la pérdida energética incluyen fachadas, las cubiertas, los suelos, los huecos y las ventanas.

Además de los elementos constructivos se tienen en cuenta las instalaciones de la vivienda tales como equipos de refrigeración, calefacción, agua caliente sanitaria, etc.

Hacer mejoras en estos elementos ayudará a mejorar la calificación energética.

Para cualquier proceso de compra-venta o alquiler de un inmueble el propietario debe tener el certificado energético antes de formalizar estas operaciones, según lo que establece la ley.